La Hidrocortisona es el término médico para el cortisol, el cual es un esteroide natural, y que, además, puede encontrarse en múltiples presentaciones. El cortisol es la principal hormona producida por la glándula suprarrenal, que es un pequeño órgano localizado por encima de los riñones.
Esta glándula es de vital importancia porque se encarga de regular, procesos primordiales en el cuerpo humano, como puede ser los latidos del corazón o la presión arterial. Por tanto, una situación en la que no se obtengan las hormonas que esta produce, requiere una atención cuidadosa.
Es por estas razones que la Hidrocortisona tiene un uso muy difundido, y, se presenta por la OMS (Organización mundial para la Salud) como uno de los medicamentos esenciales a tener en cualquier institución médica.
Para qué sirve la Hidrocortisona
La Hidrocortisona, como ya se mencionó, es el nombre médico que se le da al cortisol. Su función puede ser muy variada, según sea el caso.
Por lo general, esta se prescribe cuando la glándula suprarrenal no produce la suficiente cantidad de cortisol para el cuerpo, por lo que se busca usar la hidrocortisona para suplir esta falta. Aunque, también es utilizado para otras finalidades.
Una práctica muy extendida es la aplicación como medicamento antiinflamatorio, ya que esta puede aliviar la inflamación en múltiples partes del cuerpo, además de reducir la hinchazón, el enrojecimiento y el dolor.
También, se aplica para tratar diferentes reacciones alérgicas, y algunas enfermedades autoinmunitarias, tales como asma, afecciones y trastornos cutáneos, picazón, entre otras.
Se puede emplear para tratar algunas formas de artritis, trastornos intestinales, e, incluso, algunos tipos de cáncer, como linfoma, mieloma o leucemia, ya que, este medicamento también ayuda a tratar las náuseas que producen algunos tratamientos relacionados con la quimioterapia, y estimula el apetito a los pacientes que padecen de esta enfermedad.
La Hidrocortisona se puede encontrar en diferentes presentaciones, como lo son la Hidrocortisona en crema, inyección, ótica y rectal, las cuales describiremos cada una de ellas a continuación:
Hidrocortisona tópica
Este tipo de presentación, el cual incluye, pomadas, cremas, soluciones o aerosoles, es prescrito para tratar algún tipo de afección cutánea o alergia en la piel, que puedan causar, enrojecimiento, hinchazón, dolor o picazón. Se utiliza Hidrocortisona tópica en estos casos, ya que se busca aprovechar las sustancias naturales que se secretan a través de la piel, para activar el medicamento.
La Hidrocortisona tópica requiere de una cita médica para recibir una indicación de uso adecuada. Sin embargo, esta suele ser aplicada de 1 a 4 veces al día, en la zona que lo amerite. Es importante tener presente que no es recomendable que se aplique más cantidad, o menos, de la prescrita, ya que podría no hacer el efecto que se necesita, o en su defecto, tener efectos secundarios a los esperados. Y, el tratamiento, por lo general, dura alrededor de las 2 semanas de aplicación.
Este medicamento no debe ser aplicado en lugares o zonas en donde el médico no haya indicado la necesidad del mismo. Y, es necesario recordar que la hidrocortisona tópica es explícitamente para su aplicación en la piel, y en los casos que ya se comentaron, a menos que sea recetado por el médico.
Efectos secundarios de la Hidrocortisona tópica
Se debe tener presente que cualquier medicamento que se suministre, puede generar efectos secundarios en la persona, por ello, es necesario ser consciente de cuáles son dichos efectos, para estar atento ante su aparición.
En el caso de la Hidrocortisona tópica, estos efectos no esperados pueden ser, ardor, irritación o resequedad de la piel, así como cambios en el color de la piel o acné. Incluso, es posible que se presente sarpullido en la boca, o bultos blancos o rojos sobre la piel a tratar.
Estos efectos pueden llegar a aparecer, y no suele tener un significado negativo más allá de que es una reacción al tratamiento. Sin embargo, hay efectos que se pueden considerar graves si aparecen durante la aplicación del medicamento, como lo es una picazón intensa o algún signo de infección en la piel que se está tratando.
Ante estos últimos síntomas es urgente visitar a un médico, y que se le indique una nueva dosis, o en su defecto, un tratamiento diferente para la enfermedad que padece. Además, en el caso de niños se debe tener muy presente el riesgo que puede implicar al desarrollo del mismo, y solo aplicar la Hidrocortisona tópica si es recomendada por el especialista.
Hidrocortisona inyectable
La Hidrocortisona inyectable es utilizado para tratar la falta de algunas sustancias que produce el cuerpo, es decir, al presentarse niveles bajos de corticosteroides. Estos son hormonas esteroides, que son necesarios para el correcto funcionamiento del organismo.
También, suele ser usado para tratar alergias graves, la artritis, lupus, enfermedades gastrointestinales, o hasta la esclerosis múltiple. Incluso, puede servir para combatir afecciones en los ojos, en la sangre, los riñones, pulmones o el sistema nervioso.
Este medicamento es presentado como polvo, y se debe diluir para poder ser inyectado. La dosificación adecuada para la Hidrocortisona inyectable depende de la afección que se vaya a tratar, y de la manera en que se responda al tratamiento dado.
Sin embargo, la dosis recomendada para adultos va entre los 100 y los 200 miligramos al día, distribuido en varias dosis, y pudiendo aumentar la dosis si la situación es de emergencia y lo amerita. Para niños, por el contrario, la dosis recomendada está entre 0.19 y 0.38 miligramos por kilogramo de peso corporal, dividido en 3 dosis.
Es de tener cuidado, que la aplicación de este medicamento en niños o adolescentes puede causar problemas en el crecimiento del individuo, los cuales podrían ser irreversibles.
Efectos secundarios de la Hidrocortisona inyectable
Esta inyección puede provocar al paciente una gran variedad de efectos secundarios durante el tiempo que dure el tratamiento. Entre ellos se encuentran mareos, acné, dificultad para conciliar el sueño, dolor de cabeza, manchas en la piel, cambios de humor, aumento de peso, debilidad, sudoración, depresión, cansancio, hipo, irregularidad en los periodos menstruales, apetito, entre otros.
Debido a la larga lista de efectos secundarios, se debe estar muy atento a cualquier cambio en el cuerpo mientras se aplique este medicamento, y entendiendo también que no es necesario preocuparse por estas reacciones.
No obstante, si estos efectos se presenta acompañado de otros de mayor gravedad, entonces se debe priorizar la consulta médica ante cualquier cosa. Estos efectos son: fiebre, escalofríos, problemas de visión, inflamación de alguna parte del cuerpo, convulsiones, picazón intensa, dificultad para respirar o tragar o dolor en el estómago.
Ante estas situaciones, lo mejor es suspender la aplicación de la inyección e ir con un médico que pueda chequear la reacción que ha tenido el medicamento, asegurando que no sea una reacción alérgica, y si es necesario, cambiar completamente el tratamiento suministrado. Y, al igual que las otras presentaciones de Hidrocortisona, tener especial atención con el uso en niños y adolescentes, debido a las reacciones negativas que este puede tener.
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Hidrocortisona ótica
Al igual que las demás presentaciones, la Hidrocortisona ótica se utiliza con un fin totalmente diferente, ya que, este medicamento es empleado, generalmente, para tratar infecciones en el oído externo de un paciente, ya sean niños o adultos. Por tal motivo, este se encuentra de manera líquida y envasada para poder ser aplicada con facilidad.
Para esta presentación es importante ser cuidadoso a la hora de aplicar el medicamento, de forma de no exceder la cantidad prescrita por el especialista. Al igual que se debe tener precaución al momento de manejar el envase en donde se encuentra la Hidrocortisona, ya que, se debe evitar siempre que el gotero toque el oído, o cualquier superficie que pueda, posteriormente, afectar negativamente en la mejora del oído.
Para su aplicación, la dosis que sea prescrita, se suele aplicar 2 veces al día, pudiendo esto variar según sea la gravedad de la infección o la respuesta al mismo. Frecuentemente, es recomendado que se utilice durante 7 días, para que la bacteria se pueda eliminar por completo y evitar que esta aparezca de nuevo siendo resistente a la Hidrocortisona. Además, es fundamental que no sea aplicado en cualquier zona diferente a los oídos.
Efectos secundarios de la Hidrocortisona ótica
De entre todas las presentaciones, la Hidrocortisona ótica es la que menos efectos secundarios puede provocar en el paciente, por lo que puede ser muy cómodo de emplear, al no existir un gran temor de padecer algún efecto adverso al ideal, e, inclusive, el mayor porcentaje de personas que usan estas gotas no tienen ningún problema durante la utilización de las mismas.
El efecto secundario más recurrente para este medicamento es el dolo de cabeza, lo que lo hace un tanto llevadero en caso de que se presente durante los días de tratamiento. Aunque, si surgen otras reacciones diferentes a la mencionada, puede significar que se está teniendo una reacción no deseada, la cual puede ser grave, e incluso puede deberse a una alergia al medicamento suministrado.
Esto quiere decir que, si la Hidrocortisona ótica causa sarpullidos, dificultad para respirar y tragar, o inflamación en diferentes partes del cuerpo, como ojos, manos, garganta, cara, pies, lengua, piernas o labios; lo mejor es suspender de inmediato el tratamiento y recurrir a una consulta con un especialista que pueda determinar si es recomendable continuar aplicando las gotas, o si, por el contrario, el camino idóneo es conseguir otra manera de tratar con la infección en el oído.
Hidrocortisona rectal
Este medicamento se utiliza principalmente para tratar inflamaciones y lesiones en el recto e intestino grueso, ayudando también a aliviar problemas de hemorroides, picazón, enrojecimiento, entre otros. Al igual que la hidrocortisona tópica, esta se activa con las sustancias que secreta la piel, de forma que su aplicación es directa en la zona de interés.
La Hidrocortisona recta se puede encontrar de diferentes formas, ya sea como crema, supositorios, espuma o enema, por lo que es fundamental que sea aplicado exactamente como lo indica las instrucciones de uso, y como sea recomendado por el médico que lo haya prescrito, cuidando la dosis y respetando el tiempo entre cada una de ellas.
La cantidad a suministrar puede variar según la enfermedad que se desee tratar. Por ejemplo, para las hemorroides es recomendado que sea aplicada la Hidrocortisona como crema, de 3 a 4 veces al día, teniendo cuidado de no aplicarlo directamente con los dedos. Al contrario, para la proctitis, se usa preferiblemente la espuma de Hidrocortisona y se aplica de 1 a 2 veces al día, con la posibilidad de ir reduciendo la dosis si se nota alguna mejora durante su aplicación.
Siempre, ante todo medicamento, es prudente consultar con el médico si no se perciben cambios positivos.
Efectos secundarios de la Hidrocortisona rectal
La Hidrocortisona rectal, a pesar de que no se espera que tenga ningún efecto negativo en el organismo, es posible que se presenten algunos efectos secundarios menores durante su aplicación, lo cual no es muy frecuente, pero siempre existen pequeñas posibilidades.
Dichos efectos pueden ser muy variados y dependen completamente de la persona que se aplique el medicamento, y de cómo reaccione el cuerpo a este. Para esta presentación de Hidrocortisona, es larga la lista de posibles efectos, la cual incluye, sudoración, irregularidad en la menstruación, acné, dificultad para conciliar el sueño, debilidad, mareos, dolor de cabeza, cambios de humor, entre otros.
Estos no deben ser de preocupación, a no ser que su aparición genere algún otro problema. Sin embargo, además de los efectos ya mencionados, existen otros efectos cuya presencia es más alarmante, y requiere un análisis médico. Algunos de estos efectos son hemorragias, sarpullido, depresión, problemas de visión, picazón, inflamación en diferentes partes del cuerpo, dificultad para respirar o para tragar o urticaria.
Ante la aparición de cualquiera de estos síntomas, es necesario que se detenga la aplicación del medicamento y se consulte con un especialista lo antes posible para evitar problemas mayores. Además, es prudente saber que su aplicación no se debe realizar por periodos prolongados de tiempo, aunque no haya problema aparente.
Hidrocortisona oral
La Hidrocortisona en comprimidos o suspensión, que se suministra por vía oral, cumple múltiples funciones según sea la necesidad del paciente. Este medicamento es prescrito por el médico para intentar sustituir la producción natural de cortisol en el organismo, cuando este no es producido en cantidades suficientes, lo que genera diferentes problemas en el cuerpo humano.
También, es utilizado para tratar inflamaciones y dolores en el cuerpo, algunas formas de artritis, alergias, asma, trastornos en la piel o en la sangre, e, incluso, algunos tipos de cáncer.
Esta presentación, en forma de tabletas, se debe ingerir con la dosis proporcionada por el especialista, para cumplir con exactitud el tratamiento establecido. Es importante que se siga las instrucciones tal y como lo indica el medicamento, y como lo recomienda el doctor. Esto es primordial, ya que, una suspensión pronta del tratamiento y de forma repentina, podría causar algunos efectos secundarios en la persona enferma.
Por esta razón, lo más probable es que, a medida que se vaya mejorando con la ingesta de Hidrocortisona oral, se reduzca gradualmente la dosis de la misma, para lograr que el cuerpo se vaya adaptando al cambio, sin que se generen efectos no deseados que afecten negativamente al individuo.
Efectos secundarios de Hidrocortisona oral
Durante la ingesta de este medicamento, es posible que se presenten una serie de reacciones, que pueden resultar molestas e incómodas. Estas, no reflejan un mal funcionamiento del medicamento, solo son efectos secundarios que ocurren en ocasiones puntuales.
Entre los efectos antes mencionados, encontramos: Ansiedad, acné, dolor de cabeza, vómito, insomnio, mareo, malestar estomacal, depresión o irregularidad con el periodo menstrual. Es precaución estar pendiente de la aparición de cualquiera de estas reacciones, para controlar de que no empeoren.
A pesar de ello, existen efectos secundarios que se pueden considerar graves, y que, de manifestarse, lo más seguro es dirigirse con un médico que pueda examinar la situación, y determinar cuál son las mejores opciones a considerar. Dichos efectos son hinchazón en la cara o piernas, debilidad muscular, problema de visión, o infecciones de larga duración.
También, es de especial consideración conocer que la Hidrocortisona puede hacer que el cuerpo esté más susceptible a las enfermedades, por lo que, de estar en contacto con alguien que padezca sarampión, tuberculosis o varicela, lo ideal es dirigirse con un doctor, y realizar exámenes que determinen si contrajo, o no, la enfermedad.
Incluso, es posible que se le pida que tenga un monitoreo constante del peso corporal, para evitar cambios bruscos del mismo.
Lidocaína Hidrocortisona
Este medicamento actúa como un antiinflamatorio anorrectal, o un anestésico local. Este se aplica directamente sobre las mucosas rectales, teniendo una actuación rápida, y su efecto puede durar de 30 minutos a 1 hora. Al ser aplicada, es absorbida rápidamente y se metaboliza en el hígado, logrando con ello, disminuir la picazón, la inflamación, el dolor y la irritación.
También es utilizado para el manejo del dolor ante intervenciones manuales anorrectales, las cuales pueden provocar dolores quirúrgicos, además de tratar hemorroides, fisuras anales o criptitis.
Para su aplicación, va a depender si se necesita en adultos o niños, y del tipo de presentación que sea. En el caso de adultos, es necesario que se aplique de 3 a 4 veces al día, si es en forma de crema, y, 2 veces al día, si son supositorios.
Para los niños, mayores de 2 años, se aplica en forma de crema, 2 veces al día. Se recomienda que, para estos casos, se coloque la mínima cantidad posible. Esto con el fin de prevenir los posibles efectos que el medicamento pueda tener en menores, ya que puede alterar el desarrollo del mismo, retrasando su crecimiento de forma permanente, y alterando su metabolismo.
Efectos secundarios de la Lidocaína Hidrocortisona
Durante el uso de la Lidocaína Hidrocortisona, se pueden presentar diferentes efectos secundarios menores, como irritación, picazón o ardor en el recto, lo cual puede ser tratado por un médico, y sobrellevarse de buena manera.
Sin embargo, existe efectos secundarios que se consideran de gravedad, y que, de presentarse en el paciente, es necesario que se dirija con urgencia con un especialista. Dichas reacciones son: alergia al medicamento, que se manifiesta como hinchazón en el cuerpo, comezón, o dificultad para respirar; cambio de color en la piel, cansancio, náuseas o pérdida de peso.
Incluso, es posible que el efecto sea aumento de peso en zonas específicas, como el cuello, la espalda o la cara.
Cualquiera de estos efectos que se presente durante la implementación del medicamento, debe ser suspendido de inmediato, y requiere que un médico determine un tratamiento alternativo, que sea recibido de mejor forma por el organismo.
Hidrocortisona mecanismo de acción
La Hidrocortisona, como ya se mencionó en repetidas ocasiones, es el nombre médico que se le da al cortisol. Esta es una hormona producida por la glándula suprarrenal que se encarga de controlar el funcionamiento de gran parte de los sistemas corporales, desde el sistema inmunitario, hasta el sistema cardiaco y muscular.
Por esta razón, su presencia tiene gran impacto sobre el metabolismo, pudiendo alterar considerablemente el mismo.
Una forma de actuar que tiene la hidrocortisona, es que, para disminuir la inflamación en alguna parte del cuerpo, este evita que los leucocitos, quienes son las células que previenen las infecciones, se desplacen hasta la zona de inflamación. Esto hace que la hinchazón disminuya, pero, al mismo tiempo, facilita la captación de nuevas enfermedades e infecciones.
Otra función característica de este medicamento, es el de alterar las respuestas del sistema inmunitario, con el fin de combatir enfermedades como la anemia. Por otro lado, también puede ser útil para tratar enfermedades relacionadas con la sangre, ya que provoca la destrucción celular de determinadas células malignas, para así tratar enfermedades como la leucemia o mieloma.
También ayuda a tratar la falta de apetito en algunos pacientes, o las náuseas provocadas por la quimioterapia, aunque no se conoce con exactitud el mecanismo de acción de la Hidrocortisona para tratar estas afecciones.
