Tras la guerra con Chile, la sociedad peruana se encontraba en ruinas sin ningún dirigente civil en la capacidad de tomar las riendas del gobierno. Fue en este tiempo, donde se consideraron las causas de la derrota frente a Chile, y se planearon las acciones necesarias para restituir al país. Posteriormente, fue el presidente Miguel Iglesias, militar que tomó las riendas y se ocupó de la rendición del Perú y la firma del tratado de Ancón en 1883.
SEGUNDO MILITARISMO EN LA RECONSTRUCCIÓN NACIONAL
Las situaciones que atravesaba el país, tanto en lo político como en lo social durante la Guerra con Chile, dio lugar a la reaparición del caudillismo y el militarismo. Sin embargo, no todos los caudillos ocuparon cargos militares en esta etapa.
El historiador Jorge Basadre, estima que el segundo militarismo fue algo parecido a una reivindicación tras la derrota con Chile. Esta etapa estuvo dominada por los personajes Miguel Iglesias, encargado de firmar el tratado de paz con Chile (Tratado de Ancón), y Andrés Avelino Cáceres, quien se negó a aceptar el fracaso, lo que le permitió trascender la guerra.
En este periodo, también se pudo apreciar el surgimiento de caudillos civiles, entre los que se encontraban, Nicolás de Piérola, unos de los precursores de la oposición contra Manuel Pardo, quien también instauró una dictadura al ausentarse el presidente Pardo durante la Guerra con Chile. El mismo también se rebeló contra el segundo gobierno de Cáceres.
Finalizada la guerra, la economía del Perú se vio realmente afectada. En lo económico, se puede resaltar la crisis fiscal, la pérdida del salitre y del guano, la paralización del aparato productivo del país, disminución del comercio y la destrucción del sistema ferroviario. No obstante, el problema más grave fue el aumento de la deuda externa y la pérdida del crédito exterior.
APARICIÓN DE LOS PARTIDOS POLÍTICOS
La comunidad peruana, se dirigió a la Guerra con Chile sin ser capaces de formar una sólida vida política. Únicamente se había formado el Partido Civil, fundado en 1871. Tras la Guerra con Chile, la política peruana alteró su rumbo. Fue entonces, indispensable la constitución de agrupaciones políticas sólidas, capaces de representar las distintas posturas de la población.
Estas agrupaciones, además, se encargaron de establecer filiales en todo el país. De esta manera, aparecieron dos partidos en el año 1884. Por un lado, el Partido Demócrata fundado por Nicolás de Piérola contando con el soporte de los adversarios de Cáceres. Por otro lado, el Partido Constitucional, liderado por el general Cáceres, percibió la adhesión de los opositores de Iglesias, los ex combatientes de la Breña, y de los ex integrantes del Partido Civil.
En el mismo año, surge el partido dirigido por José María Quimper, Partido de los Liberales, sin embargo, nunca llegó al poder. Se fundaron el Partido Unión Cívica y el Partido Unión Nacional en 1891. El primero liderado por Manuel González Prada, siendo de tendencia radical. Y el segundo fundado por Mariano Nicolás Valcarcel.
En términos generales, los partidos armonizaban en la defensa de la democracia y las libertades políticas. Los puntos de discordancia, fueron las relaciones entre la Iglesia y el Estado junto con el manejo de la economía
LA VIDA CULTURAL EN LA RECONSTRUCCIÓN NACIONAL
Con respecto a la vida cultural durante la reconstrucción nacional, los invasores chilenos acabaron con importantes monumentos y edificaciones peruanas, entre las cuales destacan la Biblioteca Nacional, la Universidad de San Marcos, y los jardines de La Exposición. En este particular, diversos integrantes de la sociedad civil encabezaron agrupaciones con el objeto de la reconstrucción del patrimonio.
Las órdenes religiosas y el sector privado, asumieron gran parte de la educación, haciéndose cargo de los colegios y las escuelas. Ricardo Palma, fue uno de los personajes que desempeñó una importante labor en la restitución de la Biblioteca Nacional.
Por su parte, la Universidad Mayor de San Marcos continuó con su misión a pesar de la situación y la escasez de recursos. En estos años, llego al país la corriente positivista, difundiendo ideas de progreso material y orden, que repercutieron en todos los ámbitos académico, político y social.
RECUPERACIÓN ECONÓMICA EN LA RECONSTRUCCIÓN NACIONAL
La situación de la economía nacional después de la Guerra con Chile, obligó a establecer una política de austeridad a cargo del Estado, en conjunto con los ciudadanos nativos y extranjeros.
Por otro lado, para hacer frente la enorme deuda externa, durante el primer gobierno de Cáceres, se acudió a la firma del acuerdo Grace en 1889. Mediante este contrato, la firma Grace, se hacía cargo del pago de la deuda y a cambio se le otorgaba la administración de los ferrocarriles durante un periodo de 66 años; además de la concesión de tierras para su explotación.
Durante la presidencia de Cáceres, por su poco valor adquisitivo se retiró de circulación el billete fiscal (moneda fiduciaria), y se crearon impuestos al tabaco, al alcohol y al opio. Piérola, se encargó de completar las reformas económicas, además de sustituir el patrón monetario de plata por el de oro.
Presupuesto Nacional antes y después de la Guerra con Chile
Durante este tiempo, se establecieron diferentes presupuestos a nivel nacional, clasificados según los años y el período pre y post guerra.
En el periodo 1875 – 1876, los ingresos nacionales fueron de aproximadamente 65.569.032 soles. Mientras que los egresos del mismo periodo, fueron de 74.377.350 soles. Por otro lado, en el periodo 1889 – 1990, el país tuvo ingresos de alrededor de 13.329.762 soles y egresos de 12.716.304 soles.
En resumen, la Guerra con Chile (Guerra del Guano y el Salitre), fue una etapa caracterizada por la reconstrucción del Perú, después de haber quedado casi completamente destruido económicamente y políticamente, debido a que sus principales fuentes de ingreso se encontraban aniquiladas.
No obstante, tanto el país como la sociedad, a pesar de haber sufrido tantos cambios, luchas, daños y adversidades, como uno lograron levantarse y ponerse por encima de la situación, dando su mejor esfuerzo para restituir una mejor y más fuerte nación.