En la onda de bodas temáticas y el show que suele acompañar este tipo de ceremonias, la pareja de novios suele elegir motivos, formas y rituales poco convencionales que logren captar la atención de sus familiares y amigos. Uno de estos atractivos, son los pasteles de boda.
¿Cómo lo hacen? Por lo general de manera jocosa, improvisada e impredecibles. Una de las mayores sorpresas, son los pasteles de boda chistosos; cuenta con imágenes que aluden a episodios poco conversados a nivel cultural, pero, que forman parte de una realidad de vida.
Por ejemplo, los pasteles graciosos para hombres o, aquellos en donde aparecen separados, halados, exhortados y/o amenazados cualquiera de los dos.
¡Vaya… qué original! Veamos de qué se trata este tipo de arte repostero.
¿Qué representa un pastel de boda chistoso?
El pastel se considera el elemento de provisión entre los esposos y su dulce sabor que acompañará la vida en pareja.
No por ello, habrá de ser conforme los patrones clásicos, por el contrario, en la medida que pasa el tiempo, se van incorporando innovaciones de formas, colores, estilos e incluso sabores.
Para la elección, generalmente los novios se dirigen a catar las diversas propuestas que habrá de presentar la repostera y de esta forma elegir en mutuo acuerdo cual considerar para esa ocasione especial.
Cinco elementos de distinción tienen los pasteles de boda chistosos
Como le hemos mencionado, la temática ha de ser un asunto inspirador, en este caso, como se trata de bromas o chistes, reflejarán un contenido digno de reflexionar, destacar y/o insinuar.
Los preceptos culturales no permiten muchas veces conversar a cerca de la realidad luego del año de casados, esto precisamente es lo que busca este tipo de diseños de pasteles.
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Hombre esposado
Se trata de un pastel cuyo motivo de inspiración es la coacción a decir sí… y, aunque existe una esposa de por medio, el hombre tendrá la libertad de decidir estando atado.
Sin duda alguna, deja ver el rol activo de la mujer en la relación, en el afán de desmitificar que sólo el sexo femenino, es el que se esclaviza en una relación.
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Hombre amordazado
Un hombre amordazado puede ser sinónimo de que habla demasiado; no se desea que cuente historias reveladoras o, en fin, una forma de subordinación del hombre hacia la mujer.
Un pastel con estas características, habrá despertar la creatividad de averiguar el porqué de la mordaza.
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Hombre cargado por su esposa
Todos sabemos la clásica historia que el hombre carga a su esposa como un símbolo de virtuosidad, caballerosidad y premiación.
Para inspirar risa y jocosidad, un pastel para bodas, habrá de reflejar lo contrario, es decir, es la esposa que se ha ganado el premio de recibir a ese hombre, pero, al mismo tiempo, podría dejar ver la responsabilidad de roles de provisión por parte de la esposa como posible variable que suele presentarse en muchos casos.
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Hombre corriendo y la esposa sujetándole
En la mayoría de las culturas occidentales, el hombre suele abandonar el hogar por factores de crianza acentuados; uno de ellos, es el típico rol de hijo, en detrimento de ser esposo.
Esta realidad, se presenta más pronto que tarde ¿Qué tal si de eso que no se habla se refleja en el pastel de boda? Llamativo, ¿verdad?