Tercer Militarismo

El comienzo del populismo en Latinoamérica inició en la década de los 30. Otorgando un legado histórico de profunda transformación para la ciudadanía. En este sentido, Perú experimento algunos cambios políticos y económicos, producto de la caída del gobierno de Augusto Leguía. Dichos cambios conllevo a la implementación de varios gobiernos militares que rigieron la sociedad peruana contemporánea. Descubre acá, todo sobre el tercer militarismo.

El Perú sobre todo

El derrocamiento de Leguía despertó la inclinación de los sectores populares por el partido Unión Revolucionaria, conformado por el militar Sánchez Cerro. Recibiendo el apoyo de los sectores populares y clase media ante las elecciones de 1931.

Debido a que prometió el control de la prensa y la educación para dirigir al pueblo hacia la construcción de valores relacionados con la religión, superación personal, la patria, entre otros.

El retorno del APRA

La caída del gobierno de Leguía conllevó al regreso del exilio de Haya de la Torre. De esta forma, la organización aprista de inmediato inició una campaña política con Haya para enfrentarse a las próximas elecciones.

Sin embargo, para los sectores populares las propuestas de Haya Torre seguían siendo muy radicales. Sumando a esto, la iglesia católica también rechazaba su ofrecimiento.

La misión Kemmerer

En el año 1930 el país estaba pasando por una inestabilidad monetaria. Por tal motivo, la junta de gobierno dirigida por el militar Sánchez Cerro decidió contratar la asesoría de Edwin Kemmerer. Quien era profesor universitario en los Estados Unidos y evaluó la situación monetaria que sufría la Nación para ese entonces.

Es por ello, que se decide en abril de 1931 fundar el Banco Central de Reserva de Perú para mantener la regular circulación de la moneda y su estabilidad. Así, fue sustituido el Banco de Reserva creado en el gobierno de Leguía.

Elecciones Generales de 1931

Dentro de la historia republicana de Perú las elecciones generales de 1931, han sido las más polémicas. Para ese entonces los candidatos al gobierno eran Haya de la Torres, apoyado por el partido Aprista y el militar coronel Sánchez Cerro por el partido Unión Revolucionaria.

Además, de eso participaron Arturo Osores y José María Ureta. Pero, la victoria fue obtenida por el coronel Sánchez Cerro. Sin embargo, Haya Torre alegó que era fraude.

Sánchez Cerro en el poder

La victoria de la elección de 1931 por el coronel Sánchez Cerro generó muchas controversias y una dura oposición, representada por el partido Aprista. Incluso, se escucharon rumores de intentos de asesinatos y conspiraciones que conllevaron a la aprobación de la ley emergencia para reprimir al APRA.

Originando una gran ola de violencia y conflictos sangrientos. Considerado el más sobresaliente de la historia peruana, el ocurrido en la revolución aprista de Trujillo en el año 1932. Luego, el 30 de abril de 1933 cuando el gobernante Sánchez Cerro pasaba revista de su ejército fue asesinado a tiros.

Pero, inmediatamente nombraron anticonstitucionalmente como gobernante interino al general Oscar Benavides. De esta manera, se daba continuidad al linaje militarista.

La Constitución de 1933

El Congreso Constitucional de 1931, dirigido por Luis Eguigure promulgó la Constitución de 1933. Dentro de los estatutos establecidos se encuentran los siguientes:

  • La religión católica era la religión oficial del país. Pero, existiría el libre culto.
  • La reelección estaba prohibida.
  • Los alfabetos estaban obligados a votar de manera secreta.
  • El periodo presidencia era de 6 años.
  • Legalización del voto femenino.
  • Se prohibía encarcelar algún ciudadano por el pago de una deuda.
  • Los ciudadanos podían laboral libremente.
  • La libertad de prensa.

Transición con Benavides

Luego de la muerte del coronel Sánchez Cerro, el Congreso Constitucional decidió nombrar al general Oscar Benavides como el nuevo presidente. En vista de su prestigiosa actuación durante los conflictos generados en Colombia en 1911.

Esta transición permitió que las relaciones con la APRA mejoraran notoriamente. Se autorizó la circulación de algunos periódicos que habían sido cerrados y se liberaron los presos políticos.

Intolerancia política

Durante el año 1936 se produjo el fin del gobierno implementado por Benavides. Por lo tanto, constitucionalmente se debía llamar a otras elecciones. No obstante, la dura situación política que está viviendo el país y el rechazo del pueblo al candidato Torre, no permitieron que participara en dichas elecciones.

Además, que los candidatos de los partidos APRA y el Partido Comunista no podían participar. Debido a que, la Constitución prohibía la participación de los candidatos apoyados por partidos internacionales con pensamientos marxistas.

En dichas elecciones resultó ganador el excongresista Luis Antonio Eguiguren. Pero, el Congreso no reconoció su victoria, fundamentando que recibió el apoyo del partido APRA. Siendo programado de nuevo el general Benavides durante tres años más.

Economía de la década del treinta

Hasta el año 1929 la economía de Perú se basaba en las exportaciones de recursos minerales como: petróleo, plomo, cobre, plata, zinc y oro. Lo cual representaba más de 65% de los ingresos del país. Además, de las exportaciones de algunos productos agrícolas como el algodón, la lana y el azúcar.

Sin embargo, en el año 1930 dichas exportaciones cayeron notablemente originado por el quiebre de la Bolsa de Wall Stret y la caída del gobierno de Leguía. Sin embargo, poco tiempo después las exportaciones fueron evolucionando.

Luego, gracias a las modificaciones de la explotación de los minerales y al mejoramiento administrativo de todos los recursos obtenidos, la economía fue mejorando. Sin embargo, no alcanzó las cifras del año 1929.

Producción algodonera

La producción de algodón es el principal producto de exportación de este país. Pues, sus plantaciones superar la producción de azúcar. Sin embargo, durante el tercer militarismo aumentaron el número de tierras arrendadas para su producción. Incluso, muchos productores de azúcar comenzaron a cultivar algodón.

Elecciones de 1939 y fin del tercer militarismo

Durante las elecciones de 1939 se pone fin a tercer militarismo, ya que el partido Comunista y APRA no podían participar por su ideología marxista. Además, que la Unión Revolucionaria había perdido fuerza tras la muerte de Sánchez Cerro.

En este sentido, los candidatos para dichas elecciones fueron Manuel Prado y José  Quesada. Quedando victorioso el banquero Prado quien tuvo un apoyo masivo con 76142 votos.

Sin duda, durante la década de los 30 el país sufrió un gran impacto social y político. Sin embargo, la sociedad peruana se vio fortalecida, gracias que el gobierno del tercer militarismo mejorará la asistencia social y comunicacional. Además, de su influencia positiva en la económica, a pesar de la crisis mundial que se estaba viviendo.

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